Desde hace muuuuchos, muchos años, los seres humanos notaron que hay 4 elementos que se mantienen constantes en la naturaleza y en la humanidad. Son indestructibles y están en el principio de todo. Además, cada uno de los 4 elementos tiene capacidad destructiva (inundaciones, derrumbes, incendios y huracanes) y (casi) todos tienen capacidad de creación (nuestros cuerpos los necesitan para vivir).
Agua
Se dice que está relacionada con la vida y la muerte. Esto porque puede subir al cielo (como la lluvia en las nubes) y bajar al subsuelo (como ríos u otros cuerpos de agua). Como siempre está fluyendo, se le relaciona con la purificación y la transformación eterna.
Cuando se usa en los espacios, su textura, su movimiento, su claridad y su sonido producen paz y relajación. Además, suele refrescar el micro-clima del lugar.
Tierra
Este elemento representa el estado sólido de la materia. Se dice que está llena de secretos porque dentro de la tierra se esconde el agua y el fuego. Además, provee el ecosistema para que crezca vegetación. La tierra es el hogar del ser humano y por eso se le considera un refugio.
La tierra se inserta en los espacios a través de la vegetación. Un espacio lleno de vegetación da una sensación de frescura y de pureza. Se recomienda tener vegetación en casi cualquier espacio – ya sea como patios internos o con macetas. De esta manera, se crea un respiro en la rutina del lugar.
Aire
La representación del elemento gaseoso se relaciona con lo infinito, lo desconocido y lo misterioso. Típicamente el cielo y el espacio exterior se han relacionado con el elemento del aire por ser cambiantes, omnipresentes e indescifrables.
Está claro que el aire está en todo espacio construido. Sin embargo, a veces los espacios se diseñan de manera que todo está muy junto, se siente hacinamiento y – sensorialmente – pareciera que cuesta respirar. Los espacios se deben diseñar con la cantidad adecuada de aire. Esto permite que cada detalle resalte como debería y que la experiencia del lugar sea agradable.
Fuego
Este es el único de los elementos que no necesitamos para vivir, pero que ha ayudado a que nuestras vidas sean más fáciles. Tiene la capacidad de transformar otros objetos. Además, es fuente de calor y de iluminación. En los espacios construidos, el fuego está presente simbólicamente en los siguientes lugares:
- La cocina: porque aquí se crea a través del calor
- Los espacios acogedores: ya que por sus materiales o tamaños, se sienten llenos de calor (aunque no sea calor físico)
- Chimeneas: aquí está presente literalmente 😉
Se dice que cuando nos rodeamos de los 4 elementos, nos estamos llenando de energías constantemente…
¿Quiere un proyecto de arquitectura se inspirado en los 4 elementos? Hablemos.